En nuestra adolescencia es que comienzan las salidas, las rumbas, los escapes, ya se terminaron los cotillones y las piñatas, aunque hoy en día mucha gente no disfruta sus etapas, tranquilos que todo llega a su momento, el tiempo de los cotillones es el mejor y nada como golpear gente para agarrar caramelos, retomando el tema, a esta edad es que empiezan las invitaciones, las jodederas, donde haces lo que nunca pensarías que harías en publico, o lo que tu mama piensa que no harías ni solo en tu casa, pero hablemos un poco sobre la conducta de las personas en estas, lo que hacen y lo que no, es típico encontrárselas en una rumba:
Comencemos con los que no hacen nada, solo van a ver a la gente, como esperando que los saquen a bailar pero aquí todos sabemos que eso no va a pasar, luego están los que van, vienen, dan vueltas y tampoco hacen nada porque vamos a estar claros a una fiesta se va a bailar y a disfrutar con los panas, yo siempre me río de los que llegan como el presidente y tal, saludando a todo el mundo.
También están los que llegan a la pista y no salen, esos son los que al final encuentras todos sudados exprimiendo las camisas, los admiro porque, yo bailo pero descanso, no exageremos en esto. Pero tienes que aprender a disfrutar los mementos de una buena forma, baila, disfruta bastante, pero consciente de lo que haces, para que no termine todo en arrepentimientos, además aprovecha mientras puedas porque las horas de trabajo que te vienen después no son normales, y esas cosas no vuelven jamas, solo como recuerdos, por ultimo olvides verle bien la cara al tipo del taxi.
@MauroLopz